Solomillo con verduras

¡Os prometo que el solomillo era más grande! Entre lo que menguó en la sartén rustiéndolo y lo grande que era el plato que lo contenía, pues parece muy renacuajo. Pero vamos, que para Pablo y para mi tuvimos suficiente, porque ese día Pau comió otra cosa.

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Esta receta es de mi tía Tere. No se si os he contado alguna vez que es una excelente cocinera. Ha vivido en París hasta que se jubiló ella y mi tío, y todas sus recetas tienen reminiscencia parisina. Por simples que sean, son todas exquisitas.

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Ingredientes (para dos personas)

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Para preparar el solomillo

• 1 solomillo de cerdo entero
• 2 dientes de ajo
• aceite de oliva virgen extra
• sal
• pimienta

Para preparar las verduras

• 1 patata grande
• 2 ó 3 zanahorias
• 1 lata de guisantes finos
• sal
• pimienta
• mantequilla
• aceite

Preparación del solomillo

• Con la punta de un cuchillo hacemos unos incisiones al solomillo y le clavamos trocitos de ajo.
• Salpimentamos el solomillo.
• En una cazuela con culo gordo (mi tía lo hace en una cazuela de hierro Le Creuset) se calienta aceite.
• Cuando está muy caliente ponemos el solomillo y lo sellamos a fuego vivo.
• Una vez sellado por todas pares, bajamos el fuego, y sin tapar del todo la cazuela lo dejamos que se vaya haciendo muy lentamente. De vez en cuando ir dándole la vuelta y regando con el aceite que hay en la cazuela, hasta que esté bien rustidito. Llegados a este punto apagamos el fuego.

Preparación de las verduras

• Patatas: pelamos las patatas y las cortamos a taquitos pequeños. Freímos en una sartén con aceite. Retirarlas a un plato con papel absorvente.
• Zanahorias: pelamos y cortamos las zanahorias en dados pequeños, como para hacer una ensaladilla rusa. Ponemos la zanahoria ya cortada en una cazuela a hervir durante 20 minutos. No poner mucha agua, la justa para cubrir y poder hervir (que no se os vaya el santo a cielo como me ha pasado alguna vez, que me he encontrado la cazuela sin agua y las zanahorias pegadas en el fondo). Salar mientras hierven. Justo antes del momento de comer, escurrimos las zanahorias, añadimos una nuez de mantequilla, pimienta y removemos hasta que se haya fundido la mantequilla.
• Guisantes: poner el contenido de la lata de guisantes en una cazuela, con el agua y todo que llevan. Calentar pero sin llegar a hervir, para que los guisantes no se pelen. A la hora de servir hacemos lo mismo que con las zanahorias, escurrimos el agua, añadimos una nuez de mantequilla y pimienta. Removemos hasta que se haya fundido la mantequilla. Los guisantes no hace falta salarlos.

Montaje del plato: en una bandeja, disponemos todas las verduras y las patatas, unas al lado de las otras, que da mucho gusto ver el colorido. Y servir con el solomillo cortado a rodajas.